Ayer por la mañana se murió mi primo Santiago, uno de los personajes más carismáticos de mi familia. Hoy hemos leÃdo en el cementerio de La Almudena, antes de su incineración, lo que a continuación os dejo escrito, y que preparamos ayer por la noche nuestra prima Mar y yo. Un beso, hermano, hasta siempre.
Querido Santi,
Todos los que estamos aquà tenemos mucho que decir sobre ti, y todo es bueno. Ayer nos decÃa tu encantadora Cristina que la tÃa Pili, tu madre tan querida por todos, opinaba que tú eras un buscador de tesoros, probablemente porque siempre andabas hurgando por todas partes en busca de a saber qué. Como te dijo Cristina cuando se lo contaste, no sabemos qué narices buscabas, porque tú eres un auténtico tesoro.
A lo mejor buscabas a personas a las que querer, porque no cabe duda de que tenÃas especial talento para querer a la gente. Creemos que, aunque eres el hombre más guapo de España -en el extranjero aún estamos buscando-, y muy probablemente el más gracioso del mundo, ésa era sin duda tu mejor cualidad. Y encontraste mucha gente a la que querer, y de la buena, de la que te devuelve el cariño. No tiene mérito: te merecÃas la devoción que te profesábamos. Qué afortunado eres, Santi: Tienes dos familias, tus amigos (tus Bomberos de Madrid sobre todos ellos) y la de toda la vida, y aquà aún estamos decidiendo cuál es la primera en tus preferencias.
Puedes sentirte orgulloso de lo valiente que has sido, de que luchaste hasta el final y aunque –desgraciadamente- no has ganado la batalla, se lo pusiste bien difÃcil a la enfermedad. Y puedes sentirte orgulloso de todos los que te queremos, aunque seguro que ahora soltarÃas alguna de tus gracias, dirÃas que algunos somos actores que has contratado o que muchos se han colado. Pero no, Santi, todos los que estamos hoy aquà te queremos, tus amigos, tu familia, tu mujer… Creemos que eres una gran persona porque grandes amigos te han acompañado a lo largo de tu vida, amigos que no te han dejado ni a sol ni a sombra, sobre todo los bomberos. Pero sin duda tus grandes triunfos son la abuela que tuviste, la abuela Pepa, de la que decÃas que era tu Ãdolo, y tus padres, el gran tÃo Manolo y la gran tÃa Pili. Quisiste que tus genes se perpetuasen en tu hijo Alejandro; pero sin duda, tu mayor éxito fue encontrar el tesoro que buscabas: Cristina. Con ella aprendiste a ser mejor persona, con ella supiste lo que era amar y ser amado, con ella atrapaste la felicidad que hoy te has llevado contigo. A Cris habrÃa que darle las gracias, y se las damos, por quererte como te quiere, por cuidarte tan bien, incluso renunciando a su vida para ocuparse por completo de ti.
Hay algo grande y único en ti, algo especial. Eres un hombre de ésos que se hicieron con un molde particular que luego algún idiota rompió, y que por eso no se vuelven a repetir. Viviste una vida llena de felicidad y de envidiables experiencias, llena también -cómo evitarlo- de algunos momentos difÃciles o incómodos, como no podÃa ser de otra forma, dada tu bondad y también tu especial habilidad por meterte en lÃos, no queremos negarlo.
Todos tenemos alguna anécdota tuya increÃble para contar, y que contamos con alegrÃa, porque el simple hecho de conocerte y de saber qué cosas hacÃas nos hace ser un poco como tú, aunque sea por simpatÃa, o por cercanÃa. Nos hiciste reÃr mucho, y aún nos reÃmos, con tus cosas. Hay tanto de lo que reÃr pensando en ti, que nos cuesta sentir el dolor de tu partida. A lo mejor porque no podemos hacernos a la idea.
Por supuesto, nunca te diremos adiós. De eso nada. Te saludo como saludé por última vez a mi padre, tu tÃo José Luis, al que tanto te parecÃas, como también al fabuloso tÃo Manolo: Todo lo más te damos un “hasta luego†lleno de esperanza de seguir sintiendo tu hermosa sonrisa y tus espléndidas bromas. Cosa que ocurrirá porque, Santiago, eres simplemente inolvidable.
Una vez le dijiste a Mar que visitando un cementerio habÃas visto un epitafio que te habÃa emocionado y decÃa asÃ: “Sólo estoy dormido; si me olvidas, moriré”.
Duerme tranquilo, Santi. Porque nunca te olvidaremos.
18 comentarios ↓
Brindaré por Santi.
Un beso.
Gracias, Fétido, brindo contigo.
Muchos ánimos, Belentxo.
Eskerrik asko, Mikel. Muy bien elegido el artÃculo de JOR.
Gracias. Se puede menear aquÃ. Después de muerto, todavÃa da guerra.
Por cierto, un dÃa de estos sale también tu recuerdo.
Gracias a todos, Santi se lo merecÃa era un Martos con mayúsculas. Va por ti Santi!
¡Eso, va por ti, Santi!
Santi ellos no te ven ,pero te sienten cerca porque no te has ido. Eres invisible al ojo humano pero no a los corazones de los que te quieren. Se nota que te quieren,enhorabuena,todos los que pasan por la vida terrenal no pueden decir lo mismo. Un beso.
Un beso, MarÃa Dolores. Gracias.
Belén, te envÃo un beso muy grande y mis condolencias para tu familia.
De nada Belen, se que la muerte tal y como pensamos que es ,no existe ,simplemente dejamos la materia que envuelve el espÃritu.Nosotros estamos más “muertos” que ellos. El espÃritu es inmortal . He tenido experiencias y se que a veces se materializan (porque yo he visto dos veces lo que llamamos fantasmas ,estando trabajando normal sin tomar droga alguna). Muchas veces la comunicación es con sueños,porque no todo el mundo está preparado para aceptar esta realidad, y algunas personas con estas capacidades son tratadas como esquizofrénicos. Puedes creerte lo que digo ,soy médica y se que esto aparentemente no es cientÃfico,pero algún dÃa todo tendrá una explicación con alguna fórmula matemática donde intervenga el tiempo, el espacio,energias, relatividad,dimensiones desconocidas, es cuestión de tiempo,aunque hay muchos que ya lo sabemos sin que nos lo expliquen los cientÃficos. Puedes estar tranquila que Santi está bien,y no le gustará veros llorar sino reir y que hableÃs de él y le conteÃs a su hijo cosas de su vida y lo mantengaÃs siempre vivo en el recuerdo. La vida real es la que él tiene ahora,esto,la vida de la tierra es más bien un taller de experiencias, y cuando terminas el curso te vas. Tiempo habrá en la eternidad de juntarnos y de contarnos las distintas experiencias. Este es mi tema preferido porque desde pequeña he tenido mucho miedo a la muerte y estoy en camino de ir superándolo. Un beso.
Gracias, Samuel. Un beso.
Sigo reiterándome, pero es que nos lo hemos pasado tan bien con él, nos hemos reÃdo tanto, que me parece increible que ya no esté. Me uno a ese “duerme Santi, que no te olvidaremos nunca”.
Hola, he mirado asi un poco enplan general tu blo. Esta entrada en particular. Escribes muy bien, me ha gustado mucho. Me has emocionado.
Saludos y recibe mi pésame.
Gracias, Jose Luis. Un abrazo.
Me puedes poner como paginas que te pueden visitar a mi y tambien a ti si pinchan en cambio yo hare lo mismo con tu pagina un saludo.
Javi
Gracias Belén, nunca olvidaré lo que leÃste. Hoy he mandado poner su epitafio.
Un beso.
Gracias a ti, Cristina. Un beso enorme.
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