Ayer vi el debate entero. Bueno, para ser exacta vi gran parte en la tele y lo terminé de oÃr en la cama, con mi reproductor de música portátil. Reconozco que ésta no es una actividad recomendable para personas de izquierda, o sensibles, ni sensibles y de izquierda: es verdad que Rajoy es más desagradable, más burdo, tiene peores modales y es aún más derechista que Zapatero, pero éste tampoco es precisamente un defensor del proletariado. Vi, y con ello me cabreé, cómo los dos acusaban al otro -otra vez- de ser más permisivo que el acusador con los emigrantes, de ser más blando con los partidos polÃticos ilegalizados, de enviar más o menos tropas a otros paÃses en “misiones de paz” (me gustarÃa saber qué entienden los militares por “pacificar”).
Eso debe ser lo que “vende”, supongo, o lo que el PPSOE cree que compra los votos. Qué pena de paÃs, ¡cómo debe de andar la cosa por ahÃ, cuando el electorado recibe de buen grado estas campañas!
Porque, ¿qué me decÃs de lo de las cejas? ¿Y lo de la niña? ¿Y lo del “buenas noches y buena suerte”? ¿Y lo de la cabeza y el corazón (y el culo)? ¿Y los atriles con forma de zeta? ¿Y los carteles para lerdos que saca Rajoy en los debates? Y sÃ, el muñequito de Llamazares en “Second Life”y los carteles de IU-Mapfre.
El broche final del espectáculo lo está dando hoy la prensa española. Qué bochorno da leer hoy los titulares (”¡cómo está la profesión!”, decÃa esta mañana Josto Maffeo en Telecinco), aún más que el dÃa posterior al primer debate.
Qué pantomima, qué porquerÃa de democracia, por llamar a esto de alguna manera. Todo se reduce a dos tipos discutiendo agriamente por idioteces, con la transparente y única intención de hacerse con el poder para seguir haciendo lo que les rote.
No hay nada que hacer. Esto es lo que hay, está claro. El señor Malo y el señor Peor, degradándose en público para conseguir votos, sin que haya duda de que uno de ellos será el que gobierne España los próximos cuatro años. Fabuloso, ¿verdad?
6 comentarios ↓
A mi me dejó loco (como sabes) que un presidente del gobierno y un candidato a tal hablen tranquilamente de que han metido a gente en la cárcel o los han sacado, que han prohibido o no partidos, que aplican o no las leyes lingüÃsticas de Cataluña. Rajoy llegó a decir a Zapatero que él habÃa multado a aguien en Barcelona.
A estos señores no les preocupa fingir que existe un pdoer judicial independiente, ni libertad polÃtica o de expresión, ni que los parlamentos tengan ninguna competencia.
No habÃa democracia de hecho, ya hemos llegado a que ni siquiera se finja que la hay.
Creo que hablaron de inmigrantes, que es lo que tenemos, y no de emigrantes, que afortunadamente son pocos.
Saludos
Como sabes, los inmigrantes también son emigrantes. Y eso es precisamente lo que más en cuenta tienen ellos: el lugar que han tenido que abandonar.
Visto lo visto, lo que a mi me preocupa, aparte de que el ZP obtenga MayorÃa Absoluta (a ver qué queda de su talante en ese caso), es ver cómo se derechiza la sociedad española y cómo cada vez la gente cuenta menos en la realidad para participar de la vida polÃtica del pais.. !Sin que les importe una mierda!
Casi hubiese preferido tener mis actuales 26 años en el 1936. Pese a lo mucho que se sufrió, hubiera luchado y probablemente muerto junto a personas maravillosas por unas ideas igualmente maravillosas, en lugar de tener que sufrir esta puta mediocridad autosatisfecha de su indigencia moral y material…
Y qué a gusto me he quedado, coño XD
Ya sé que los inmigrantes son emigrantes de su lugar de origen, pero creo que en tu artÃculo no hablas de lo que ellos piensan porque han abandonado su tierra sino de que los polÃticos hablaron de ellos como inmigrantes en nuestra tierra.
Aceptar los errores, aunque sean mÃnimos, es de sabios.
Es verdad, Madrid te mata, que no hablo de lo que los inmigrantes piensan en el post. Déjame tiempo e intentaré hacerlo. Gracias por tus comentarios.
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